sábado, 15 de octubre de 2011

¿cómo es salvo el hombre? (2): La Justificación


Veremos ahora un aspecto importante en la obra divina de la salvación: La justificación.
Grandes hombres definieron esta doctrina de la justificación como el "corazón del Evangelio" sin embargo es bueno aclarar que lo más valioso de todo el evangelio es Dios

G. C. Berkouwer " La confesión de la justificación divina toca la vida del hombre en su corazón, en el punto de su relación con Dios. Define la predicación de la iglesia, la existencia y progreso de la vida de fe, la raíz de la seguridad humana y las perspectivas del hombre para el futuro"

J. Calvino " La aceptación con la que Dios nos recibe en su favor como hombres justos. Y decimos que consiste en la remisión de pecados y la imputación de la justicia de Cristo"

M. Lutero " Cristo asumió todos los pecados y por eso murió en la cruz... son justos porque creen en Cristo, cuya justeza los cubre y se les ha imputado"

La justificación es una de las facetas del evangelio que más preciadas me parecen.
La necesidad fundamental del hombre que aborda el evangelio es planteada por el don de la justificación. No solo nos encontramos fuera de Dios, sino que la ira de Dios esta completamente sobre nosotros (Juan 3:36; Romanos 1:18; 5:9; Gálatas 3:10). Eso significa que lo que debemos cambiar es fundamentalmente, la ira de Dios hacia nosotros debido a nuestro pecado que deshonra a Dios (Romanos 3:23). Pero hay un problema con esto para nosotros, no podemos cambiar a Dios, es simplemente imposible tratar por nuestras fuerzas cambiar a Dios, ni siquiera podemos pagar nuestra propia deuda, estamos inhabilitados, el hombre no puede hacer nada al respecto (Salmos 49:7).

Por consiguiente Dios, sabiendo nuestra incapacidad y nuestra evidente condena, en su infinita misericordia, intervino y puso a Cristo como propiciación de la misma ira de Dios (romanos 3:25), Jesucristo el hijo de Dios, hombre perfecto y sin pecado, asumió la maldición que nosotros merecíamos (Gálatas 3:13) ..."quién llevó el mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero..." 1 de Pedro 2:24.

Pero no solo es que nuestros pecados se le imputarán a Cristo sino que su justicia se imputará a nosotros, 2 de Corintios 5:21 "Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él".

Así que la justificación tiene dos grandes puntos que debemos entender: La supresión del pecado porque Cristo asume nuestra maldición y la imputación de la justicia porque estamos en Cristo y su justicia se cuenta como nuestra.

La justificación es el "corazón del evangelio" sin embargo no es su más elevado bien, el bien más elevado que hace que el evangelio sean buenas nuevas es Dios. Ninguna de las facetas del evangelio, incluyendo la justificación, es el bien principal o la meta más elevada del evangelio. Solamente es una: Contemplar y deleitarse en Dios mismo, siendo cambiado a la imagen de su Hijo, para que nos deleitemos y mostremos más y más la belleza y el valor infinito de Dios.

Fuente: Dios es el evangelio - John Piper

martes, 20 de septiembre de 2011

La autoestima, el pensamiento positivo y Filipenses 4:13


Filipenses 4:13 de manera famosa dice: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Tal vez no hay declaración más segura en toda la Escritura.

Pero no es una descarada confianza en sí mismo. Es la confianza en el poder de Cristo.

Ese versículo no es un manifiesto a favor de la autoestima y del pensamiento positivo aunque a menudo es utilizado como tal. Las personas citan el versículo como si significara “Con la ayuda de Jesús se puede lograr todo sueño que tengas para ti mismo.” Esa no es la idea.


Pablo está hablando como un hombre que quiere hacer la voluntad de Dios y sabe que es demasiado débil y pecador para hacerlo, pero él está echando mano del poder de Cristo para que haga en él lo que él sabe que no puede hacer por su cuenta, en otras palabras "todo lo puedo en Cristo que me fortalece" es una dependencia en Dios que el nos da las fuerzas necesarias para soportar cualquier situación, y no que el nos da lo que queremos como se ha llegado a mal interpretar.

La referencia adecuada es 2 Corintios 3:5: “no que seamos suficientes en nosotros mismos para pensar que cosa alguna procede de nosotros, sino que nuestra suficiencia es de Dios.” Pablo no está simplemente modelando el principio que él dio como imperativo en Efesios 6:10: “fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza.”

No hay espacio para una medida carnal ni un ápice de autoestima, si usted entiende este principio.

Dios es nuestra fortaleza , así que cualquiera sea la situación podemos estar gozosos. Filipenses 4:13

martes, 31 de mayo de 2011

La Teología y la música

La Teología y la música

fuente: http://evangelio.wordpress.com


La teología no es el tema más popular entre los cristianos, especialmente los músicos cristianos. La palabra misma evoca imágenes de hombres viejos orgullosos estudiando libros gruesos, discutiendo acerca de temas secundarios que nadie alguna vez comprenderá de alguna forma. 

La teología literalmente quiere decir “el estudio de Dios,” en particular como él se ha revelado a sí mismo en la Escritura. Incluye no sólo el estudiar la Biblia, sino el entender cómo las diferentes partes de la Biblia encajan. 

Los músicos cristianos necesitan saber teología. Pero déjeme citarle 4 objeciones antes de decirle el por qué. 


1. Las personas solo discuten acerca de la teología. 

Sí. En parte porque somos pecaminosos. Pero en su mayor parte porque hay algunas verdades que son dignas de defender y pelear por ellas. Aun hasta morir por ellas. 

2. La teología solo hace la vida complicada. 

Depende de lo que usted quiere decir por complicado. Si usted piensa que el conocer cómo tocar sus instrumentos lo hace complicado, entonces sí, la teología hace la vida complicada. Y le puedo decir que el conocer bien a Dios implica más trabajo que conocer su guitarra o su teclado. Pero si pudiésemos llegar a comprender a Dios completamente, él no sería mucho de un dios. Si Dios es realmente Dios, nuestras mentes serán expandidas hasta sus límites al intentar comprenderle mejor. 

La teología no lo hace complicado. Realmente hace la vida más simple. Nos protege de leer en voz alta versículos fuera de su contexto o leer sólo nuestros pasajes favoritos. La teología nos dice qué le importa a Dios y nos ayuda a evitar hacer decisiones basadas en el impulso en vez de la verdad. La teología nos dice qué significan palabras tales como gloria, evangelio, salvación, y amor. La teología nos ayuda a comprender lo que estamos realmente haciendo cada domingo. Lo que complica la vida no es la teología sino la ignorancia de la teología. 

3. Estudiar Teología Enorgullece a las personas. 

No debería. Mientras mejor conozcamos a Dios, más humilde deberíamos ser. Entre más nos percatemos de lo que sabemos siempre nos encontraremos más pequeños por lo que no sabemos. Escuche al teólogo Pablo: 

!!Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! !!Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén." 


4. De Cualquier Manera nunca lo Sabremos Todo. 

Justo porque no podemos saber todo acerca de Dios, no quiere decir que no podamos saber algunas cosas verdaderamente. Dios se ha revelado a nosotros en su Palabra y nos ha dado su Espíritu a fin de que le podamos conocer. 

La Escritura es la revelación divina. No es una colección de opiniones sobre como diferentes personas ven las cosas y que nos dicen más acerca de las personas que de las cosas. No. Nos da el conocimiento perfecto de Dios de sí mismo y de toda verdad. Nos es dado en una forma en que podemos comprender. La razón por la que Dios nos lo dio es que él quiere que nosotros le conozcamos. Para no adivinar. Para no tener impresiones ambiguas. Y seguramente no para ser conducidos al error. Él quiere que nosotros le conozcamos.

En lugar de causar problemas, la teología, correctamente aplicada, soluciona los problemas. Les dice a nuestras mentes que piensen para que nuestros corazones puedan saber qué sentir y nuestras voluntades pueden saber qué hacer, todo para que podamos amar más a Dios completamente y apasionadamente. 

He aquí tres razones de porque la teología debería tener importancia para los músicos cristianos: 

1. Usted es ya un teólogo. 

Cada cristiano es ya un teólogo. La pregunta es, ¿es usted un buen teólogo o uno malo? 

Somos buenos teólogos si lo que decimos y pensamos acerca de Dios se ajusta con lo que la Escritura dice y afirma. Somos malos teólogos si nuestra visión de Dios es ambigua, o si pensamos que Dios realmente no presta atención al pecado, o si vemos a Jesús como un buen ejemplo y no como un Salvador, o si nuestro dios es muy pequeño para superar el mal o demasiado grande para preocuparnos por nosotros. 

¿Cómo se convierte usted en un buen teólogo? Primero, leyendo, estudiando, y meditando en la Biblia, la auto-revelación de Dios. Muchos de nosotros estudiamos nuestras Biblias como si hiciésemos ejercicio. Sabemos que es bueno para nosotros. Intentamos hacerlo. Hablamos como si nosotros en realidad tuviésemos una rutina normal. Y la mayoría de las veces olvidamos hacerlo. 

Usted también se convierte en un buen teólogo por los libros de texto escritos por aquellos que han leído, estudiado, y han meditado en la Biblia. 

He conocido a las personas que no leen los libros de teología porque no quieren que su comprensión de la Biblia sea influenciada por alguien más. Lo que dicen es: “Dios posiblemente no podría usar a otra persona para ayudarme a comprender su Palabra con más claridad.” Eso es ridículo. Necesito toda la ayuda que puedo obtener. Así es que hágalo. 

2. Dios se revela a sí mismo primordialmente a través de palabras, no por música. 

Al igual que yo, usted probablemente ha tenido encuentros profundos con Dios durante el culto musical. 

2 Cron. 5:13 “cuando sonaban, pues, las trompetas, y cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a Jehová, y a medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de música, y alababan a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre; entonces la casa se llenó de una nube, la casa de Jehová.” 

O ¿qué tal cuando David tocó la lira para el Rey Saúl (1 Samuel 16:23)? ¿No ha experimentado usted una paz inusual o ha sentido la cercanía de Dios en una forma inesperada mientras la música se toca? Cuando eso ocurre es un don de Dios. 

Pero equivocadamente podemos empezar a asumir que las palabras restringen el Espíritu, mientras que la música nos permite experimentar a Dios en formas frescas y poderosas. Somos atraídos por ese mundo excitante de emociones, incertidumbre e impulsos espontáneos que son difíciles de definir definitivamente experimentadas.  Si Dios hubiese querido que nosotros le conociéramos primordialmente a través de la música, la Biblia sería una banda sonora, no un libro
Ser movido emotivamente por la música es diferente de ser transformado espiritualmente por la verdad absoluta. La música nos afecta y nos ayuda de muchas formas, pero no reemplaza la verdad acerca de Dios. Por sí misma, la música nunca nos puede ayudar a comprender el significado de la auto-existencia de Dios, la naturaleza de la Encarnación, o la expiación substitutoria de Cristo. 

Para ponerlo de manera simple, la verdad excede a las melodías. Si queremos conocer a Dios mejor, tendremos que estudiar su Palabra. 
¿Qué sucedería si fuésemos tan dedicados para estudiar y escuchar a Dios como lo somos para estudiar y escuchar música? Los resultados podrían ser radicales. 

3. Ser buenos teólogos nos hace mejores a los músicos. 

No digo que debiésemos estudiar teología a fin de que podamos convertirnos en mejores músicos. Sino que ser un mejor músico es simplemente un fruto de ser una buen teólogo. He aquí algunas de las cosas que la teología nos enseña: 
La teología nos enseña qué se quiere decir con la música. 

Se quiere decir que la música prolonga y expresa emociones fuertes para Dios. La música quiere decir ofrecer palabras, no minimizarlas o eliminarlas. La música quiere decir edificar y expresar unidad en la iglesia, no desalentarla o dividirla. La música, con todos sus estilos, variaciones, y géneros, significa darnos un cuadro de la gloria y la creatividad de Dios. La música no derriba a Dios, o en cierta forma manipular la presencia de Dios sino que hace a Dios surgir,. Esa es la obra del Espíritu Santo, y El nos hace estar concientes de la presencia de Dios con o sin música
La teología nos enseña que el culto es más que música. 

Las palabras que usamos para traducir “adoración” en el Antiguo y Nuevo Testamento tiene que ver con postrarse, mostrar reverencia, y servir a Dios en toda vida. Sólo pocas veces es asociada la adoración con la música. La música es una expresión de mi adoración a Dios, no la suma total de él o aun la mejor parte de él. Dios es adorado cuando los esposos aman a sus esposas, cuándo los niños obedecen y honran a sus padres, cuando compartimos el evangelio, cuando nos comprometemos a una iglesia local, cuándo servimos a los demás, cuándo somos generosos y alegres en medio de las pruebas. Adoramos a Dios cuando echamos mano de su gracia para resistir la murmuración, la pornografía, y la ira. 

La teología nos enseña que Jesús es mejor que la música. 

La música me puede dar comodidad temporal. Jesús me puede dar comodidad duradera

2 Timoteo 2:16 "Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia. "

La música no me puede llevar a la presencia de Dios – Jesús si puede y lo hizo. 

Heb. 10:19 Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo. 

La música no murió por mis pecados para reconciliarme con Dios. Jesús lo hizo. 

1 Pedro 3:18 Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu; 

La música no es mediadora entre Dios y yo. Jesús si. 

1Tim 2:5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre. 

La música sólo puede hacerme SENTIR esperanzador. Jesús resucitó de entre los muertos para darme una esperanza VERDADERA POR SIEMPRE. 

1 Pedro 1:3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos. 

Así es que practiquemos nuestros instrumentos, desarrollemos nuestras habilidades, busquemos nuestra excelencia en la música con pasión. Pero recordemos que somos músicos cristianos, llamados para amar a Dios con todos nuestros corazones, almas, MENTES, y fuerzas. 

Tratemos de no ser sólo los mejores músicos que podamos ser, sino los mejores teólogos que podamos ser. Y que el nombre de Jesús sea honrado en nuestras vidas al utilizar nuestros talentos para Su gloria. 



jueves, 17 de febrero de 2011

¿Como es salvo el hombre? (1)


"Hace mucho que no actualizo publicaciones en el blog, pero en este tiempo me di cuenta de la influencia de la escritura y de estos medios, por lo tanto ahora seguiré escribiendo a menudo. El enfoque del blog era tocar temas de interés no necesariamente cristianos, pero por supuesto que no sean contrarios a la Biblia, ahora el nuevo enfoque de InfomaCHo será explicar verdades bíblicas.
La intención de este blog no es formar desunión entre cristianos, sino mostrar la verdad a la luz de la Biblia, para conocer la verdad y salir del error que muchas religiones y movimientos falsamente llamados crisianos enseñan y practican."

1ra parte

¿Cómo es salvo el hombre?

Es una pregunta que aparentemente es simple y muchas veces la contestamos mecánicamente, pero, ésta pregunta tiene una respuesta profunda y que esencialmente nos muestra a Dios.

Dios el autor de la salvación, el único que puede salvar, nadie se salva así mismo y ningún humano puede salvar a otro, quiero resaltar esto; hace un tiempo publiqué la biografía de Kathryn Kuhlman, recibí muchos comentarios contra mi persona cuestionando mi salvación y muchas cosas más, alegando que Kuhlman "salvó" a miles de personas; me pregunto, donde estarán las personas que "salvó" Kuhlman, por lo menos espero que no hayan seguido el ejemplo adúltero de su vida.

Dios salva a los que ya había predestinado para su salvación (1 Pedro 1:2; Romanos 8:29-29; Efesios 1:4), sólo de esta manera comprendemos que la savación es por gracia, que por nuestros medios es imposible alcanzar la salvación, SÓLO LA GRACIA DE DIOS es la que nos salva.

Cuando Dios salva la persona tiene cambios inmediatos y cambios a largo plazo. Inmediatamente la persona forma parte de la familia de Dios, inmediatamente los pecados son perdonados, inmediatamante esa persona es redimida etc, estos cambios inmediatos no son visibles a los hombres. Los cambios que no son inmediatos son los que son visibles a los hombres, la perseverancia en la fe, los frutos (cambios en hábitos), conocimmiento de la palabra etc.

La salvación contiene 3 aspectos necesarios que provienen de Dios: Fe (salvífica), Arrepentimiento, Conversión. Estos 3 aspectos suceden al mismo tiempo y no puede suceder uno sin el otro, es decir, no se puede tener fe salvífica sin arrepentirse, no puede haber conversión sin Fe, no hay arrepentimiento sin conversión etc, ninguno de éstos son iguales y tampoco suceden por separado.

La Fe salvífica o la Fe salvadora es aquella fe que hace que confiemos en DIos para salvación, no solamente que creamos en Dios sino que reconozcamos nuestra incapacidad y total dependencia en Dios (Efesios 2:8-9; Hechos 16:31, Juan 3:16)

El hombre por naturaleza está en rebeldía con Dios y en enemistad contra El (Colosenses 1:21), el hombre natural no puede hacer nada que agrade a Dios y por lo tanto necesita arrepentirse de su estado pecador y reconocer que el único medio para salvarse es Dios. Arrepentimiento bíblico es cambiar de parecer en lo que respecta al pecado y a Dios, el hombre debe dejar de amar el pecado y amar a Dios, apartarse del pecado y acercarse a Dios (Marcos 6:12)

La conversión es el volverse del pecado hacia Dios (Hechos 15:3). El hombre se convierte cuando, por la influencia de la gracia divina en sus almas, su vida entera cambia, las cosas antiguas pasan y todo se convierte en nuevo (Hechos 26:18). Así hablamos de la conversión del carcelero filipense (16:19-34), de Pablo (9:1-22), del tesorero etíope (8:26-40), de Cornelio (10), de Lydia (16 :13-15), y otros.

La fe, el arrepentimiento y la conversión, son obras de Dios en la vida de un pecador, estras 3 suceden simultaneamente en un mismo suceso, pero son diferentes actos de Dios.




Se expliacará mucho más en la siguiente publicación "¿como es salvo el hombre? (2da parte)"